UNIDAD DE HABITACIÓN CERRO SUR

Este texto fue extraído del catálogo de la muestra “Roman Fresnedo Siri”, realizada en 2013 por el IHA-FADU.

El conjunto estaba incluido en un plan urbano general llamado Plan de Obras del Cerro, promovido por el Departamento de Planificación del Consejo Departamental de Montevideo entre 1955 y 1959, y encuadrado en de las directivas fijadas por el Plan Director para Montevideo. Éste preveía 11 Unidades de Habitación en diversas zonas de la ciudad, entre ellas dos que se ubicarían en el barrio obrero del Cerro.

Se creó la "Dirección Gral. de las Obras del Cerro" a efectos de llevar adelante el Plan, inspirado en las teorías urbanísticas asociadas al Movimiento Moderno, con particular referencia a las Unidades de Habitación de Le Corbusier. Incluía el diseño de un parque, incorporación de servicios, la reinserción de industria y la perspectiva de una revitalización urbana general para la zona.

El director del Departamento de Planificación en ese momento era el arquitecto Julio Abella Trías, quien contrató al arq. Román Fresnedo para llevar adelante los trabajos de la nueva unidad de habitación.

El proyecto original comprendía bloques de vivienda de interés social divididos en dos unidades, -una al norte y la otra al sur- y otros equipamientos en el parque público.

La unidad sur, construida por el propio Municipio, estaba destinada a población de bajos recursos. El proyecto original incluía la realización de 6 bloques de vivienda (posteriormente fueron 3) y la construcción de servicios, en una concepción integral de la propuesta de vivienda de interés social, que no se agotaba en la construcción de simples soluciones habitacionales.

El único edificio que finalmente se construyó está situado en la falda sur del Cerro de Montevideo y sobre los bordes del Parque Vaz Ferreira, que fue diseñado y forestado –se plantaron cerca de 80.000 árboles- por Fresnedo en conjunto con el plan urbano. Se ubica además a poca distancia de la Rambla y la playa del Cerro, un paseo con privilegiada vista al río, la ciudad y el parque. La construcción de los servicios quedó inconclusa.

El bloque de viviendas de 75 metros de largo, cuatro niveles y una planta baja libre sobre “pilotis”, presenta las viviendas resueltas con doble orientación, con los dormitorios orientados al norte y disponiendo hacia el sur comedores y cocinas, volcados a amplias terrazas techadas. Este planteo genera dos fachadas muy distintas: hacia el sur, las terrazas marcan una horizontal continua, interrumpida sólo por los muros divisorios de las viviendas y, hacia el interior, un gran plano de herrería y vidrio en todo el ancho de la vivienda, a lo que se suman las barandas también vidriadas. Esto vuelca claramente el edificio y las viviendas hacia la espectacular vista del parque y el río. Las otras fachadas presentan un aspecto muy diferente al predominar en ellas el revestimiento cerámico, estando las ventanas de los dormitorios agrupadas de a tres o cuatro, resaltadas por marcos de mampostería.

Las viviendas de 3 dormitorios se ubican en los extremos y las de 2 dormitorios ocupan el resto de la tira. Las unidades se agrupan de a dos y se les accede por una circulación vertical independiente. Originalmente se creaba un gran hall longitudinal completamente vidriado que unía todas las escaleras, pero dado su deterioro fue retirado. Ello permitía mantener la transparencia generada por la elevación sobre pilotis del bloque y una gran integración visual con el parque.

Tanto el planteo urbano como la resolución del bloque, muestran una actitud netamente moderna y a la vez flexible, atendiendo las condiciones del sitio y buscando brindar una mejor calidad de vida a usuarios de muy bajos recursos.