Charles, Ray y la Case Study House Nº8
Por Jorge Casaravilla (Docente del Grupo de Viaje 2013)
Fuente: G. Koening, “Eames”. Ed. Taschen, 2005.
“En última instancia, todas las cosas establecen conexiones entre personas, ideas, objetos, etc.,… la calidad de las conexiones es la clave de la calidad en sí.”
Charles Eames
Trabajé varios años para la filial de Herman Miller en Montevideo. Allí, al igual que en los viejos salones de clase de mi querida escuela Nº 50, la foto de un hombre de mirada afable, a modo de prócer, coronaba la pared norte de la sala de proyectos: era Eames, Charles Eames.
Charles y Ray, su esposa, junto con otros Lavallejas y Riveras, (Nelson, Propst, Stumpf, Burdick) marcaron el camino y signaron la historia de esta empresa que comandó el diseño de mobiliario en el vigoroso Estados Unidos de la segunda mitad del siglo 20.
Por esa época yo era un estudiante de nuestra facultad y por tanto conocía sus hazañas en el campo de la producción de espacios habitables, fundamentalmente a través de su casa-estudio diseñada para las “Case Study Houses” en 1945, motivo de este artículo. Poco conocía de sus demás facetas creativas.
La casa, de excelente factura tanto desde el punto de vista espacial y compositivo como del tecnológico-productivo, que se sirvió de una serie de elementos prefabricados y de producción industrializada —derivados de desarrollos promovidos principalmente desde la industria bélica—, debía expresar según los autores “la vida del hombre en el mundo moderno”. Y vaya si lo hizo.
Al visitarla es relativamente fácil, desde nuestra mirada disciplinar, apreciar y entender las virtudes de su diseño. Pero sólo luego de conocer profundamente el camino recorrido por ambos en la investigación, proyecto y desarrollo de espacios y objetos de diseño es que la comprensión del mismo alcanza su plenitud. El acercamiento a sus piezas de mobiliario, sus sistemas de equipamiento modulares, sus telas, alfombras, juguetes y objetos lúdicos y la vivencia de un sin fin de espacios proyectados a través de la lente de sus cámaras, permite que las piezas se ordenen ante nuestros ojos de manera casi natural.
La casa no es sólo el producto de un diseño brillante correspondiente a un momento histórico concreto. Es un eslabón imprescindible en una larga carrera proyectual en la que arte y diseño, transitaron un único camino.
Publicado por jcasaravilla | 8 de mayo de 2013 - 16:35 | Actualizado: 29 de mayo de 2013 - 04:33 | PDF
