Convento de La Tourette
Por Bach. Martín Xifré
Programa: Monasterio
Autor: Le Corbusier
Ubicación : Éveux, Francia
Año: 1957
Estudiantes :: Martín Xifré
INTRODUCCION
El Reverendo Padre Coutourier, en 1952 y en nombre del Capitulo Provincial de los dominicos de Lyon, pidió a Le Corbusier que construyera una iglesia y un lugar de residencia para los miembros de su orden.
El alojamiento incluiría claustro, sala capitular, aulas, biblioteca, refectorio y un centenar de celdas.
Le Corbusier emprendió el trabajo de proyecto en 1953 y los frailes tomaron posesión del monasterio en el mes de julio de 1959.
El P. Coutourier esbozaba en una carta a Le Corbusier algunos requisitos importantes:
El edificio será de severa desnudez, sin flujos superfluos, aunque sin dejar de respetar las necesidades vitales ordinarias: silencio, temperatura ambiental suficientemente cálida para permitir un trabajo intelectual ininterrumpido, recorridos de circulación mínimos…Recuerde que lo nuestro es una vida comunitaria absoluta, y, por tanto, se exige que no haya diferenciaciones dentro de los grupos. 1
Otro miembro de la comunidad el P. Belaud, explica así algunas razones por las que se escogió a Le Corbusier como arquitecto.
¿Por que? Desde luego, por la belleza del monasterio a concebir, pero sobre todo por la significación de esta belleza. Era preciso mostrar que la oración y la vida religiosa no estaban encadenadas a formas convencionales, que en medio de las mismas cabía topar con la armonía y con la arquitectura más moderna, puesto que esta es capaz de trascenderse a si misma. 2
1y2. Extraídos de Jean Petit, Un Couvent de Le Corbusier
EMPLAZAMIENTO
La ubicación exacta del monasterio fue elección expresa de Le Corbusier. Lo situó en una ladera arbolada que, orientada al oeste, tenía acceso a través de una zona de bosque paralela al eje longitudinal del terreno. La elevación que ocupa el conjunto es garantía de vistas en dirección noroeste.
Le Corbusier escribía:
Llegue; como de costumbre eche mano de mi cuaderno de notas; dibuje la carretera, las vistas e indique la orientación con respecto al sol. Tome en cuenta de la topografía. Decidí el lugar, aun sin determinar, que debía ocupar. La elección del emplazamiento suponía un acto criminal o acertado. El primer gesto que se hace es elegir; elegir la naturaleza del emplazamiento y, acto seguido, la composición que se realizara en condiciones como las existentes. Me dije, en paisaje tan ondeante no puedo colocar el edificio en el terreno, su pena de que quede oculto, o bien costar tanto como una fortificación asiria. Aquí no hay dinero y no es oportuno este enfoque.
ESTRATEGIAS BASICAS
Le Corbusier parte de la planta tipo claustro, la cual corresponde a los monasterios antiguos.
Su referencia fue dada por el P. Coutourier y es el monasterio de Le Thoronet levantado en el S. Xll en la Provenza.
La primera deformación es el cambio de cuadrado a rectángulo, consecuencia del eje exterior del terreno.
La segunda deformación viene por segregar a la iglesia del resto.
La estrategia fundamental es establecer una horizontal a nivel de la cubierta, haciendo “flotar” encima del paisaje las celdas monacales. Por el contrario la iglesia es una declaración de verticalidad que se asienta firmemente en el suelo.
Levantaremos la cimentación hasta una horizontal sobre la que estará el edificio y que armonizara con el horizonte. Desde tal horizonte mediremos todo, alcanzaremos hasta el suelo. Sera una marca visible, pero esa es la intención. Por este camino tienen ustedes un edificio de gran vigor en su parte superior, que define poco a poco su organización conforme se desciende y que llega al suelo cuando le es posible. Es algo que no cabe en la concepción mental de cualquiera, es una faceta singular del monasterio, si, verdaderamente singular.
En cuanto a la materialidad Le Corbusier expone:
La piedra es allí amiga del hombre; su nitidez, asegurada por la arista, encierra planos de piel ruda; esta rudeza dice: piedra y no mármol; y piedra es una palabra mucho más bella.
Introducción de Le Corbusier a La plus grande aventure du monde, 1956.
CLAUSTRO
Este deambulatorio cerrado tuvo el efecto de dividir el edificio en dos niveles distintos: uno con la entrada, biblioteca y aulas de clase, pasando de uno a cuatro pisos en sección con el descenso de la pendiente hacia el noroeste, y dos pisos de celdas por encima, que coronando los espacios públicos, rodean tres lados de un patio interior. El sistema de rampas fuertemente inclinadas que sirve a todo el conjunto (9%) subdividía el terreno intersticial, en gran, en gran parte inaccesible, que se encuentra bajo el edificio y unía los más importantes espacios públicos – entrada, iglesia, capitulo y refectorio – con el principal punto de reunión en el atrio de doble altura.
La propia iglesia, que cierra el cuarto lado del patio, es tratada en realidad como una caja ciega.
CIRCULACION
La circulación se concentra progresivamente llevando al observador hacia el patio cuyo espacio constituye el principal foco de atención. La luz capta la visión.
El acceso al monasterio esta bajo celdas, en la zona pedagógica. Este camino tiene dos variables: 1) por circulación perimetral interior y exterior. 2) por variación en anchura del paso. esta distribución aporta cierta privacidad a algunas dependencias (incluyendo la biblioteca) y permite que otras se beneficien de las vistas. En esta misma planta se tiene la biblioteca de los novicios, la capilla y las dependencias destinadas a labores de docencia.
CELDAS PERIFERICAS
El alojamiento de los monjes se rige por criterio de antigüedad. Los novicios ocupan el ala este y la oeste se destina a los hermanos.
Los novicios gozan de su propia vía que enlaza el ala con el templo. Los miembros de mayor edad de la comunidad bajan al atrio por una escalera de caracol que está en el interior de una torre cilíndrica.
Las celdas giran en rededor del atrio en formación periférica. Para los novicios se dispone de una capilla pequeña u oratorio, volumen cubico de cubierta piramidal sustentado por apoyos cruciformes.
Se extienden a lo largo de los dos pisos superiores en el borde exterior del edificio, cada una marcada por un balcón protegido del sol: lo individual se combina dentro del orden colectivo.
Las celdas de reposo recibían la forma de megaron típico de Le Corbusier, con una puerta en un extremo y balcón en el otro, el espacio estrictamente necesario para albergar una cama, algunas estanterías y una mesa.
Los corredores de acceso a las habitaciones se extienden a lo largo de las caras internas del patio y están iluminadas por estrechas rendijas colocadas a la altura de los ojos.
CELDAS PARA VISITAS
La agrupación de celdas para visitas atrae la vista hacia la plataforma de entrada/ observación. Las celdas son los puntos de contacto con el mundo exterior, aquí las visitas hablan con los monjes sin necesidad de entrar en el monasterio. El conjunto de formas cilíndricas, reunidas como tiendas de campaña, reduce a escala humana el imponente muro septentrional de la iglesia. Al interés visual de estos cilindros se suman unas pequeñas aberturas que los puntean.
El acceso al monasterio se hace por un paso que atraviesa un puente.
PENDIENTE: EQUILIBRIO Y TENSION
Si el monasterio hubiera estado situado en un terreno llano, el eje longitudinal habría tenido una localización central. La inclinación del emplazamiento obliga a trasladar el eje para cambiar el centro de gravedad.
Esto influirá en cuestiones como la ubicación del altar. Las celdas de la fachada sur están en voladizo en correspondencia con la rotación que se les adjudica.
La expresión de verticalidad se da allí donde la pendiente genera la máxima situación de tensión. La horizontal y la vertical se conjugan en el eje de circulación.
CULTO
La cubierta inclinada del atrio lo distingue en tanto punto señalado de reunión (paso previo a cualquier desplazamiento hacia la iglesia o el refectorio).
La zona de culto separa público y monjes. El centro cultural del monasterio, lugar donde los monjes oran en altares privados, es el santuario, solo accesible desde la sacristía bajo la iglesia,
El altar se halla en el punto de intersección de los ejes principales del conjunto.
Al comentar la iglesia. Le Corbusier decía:
El centro de gravedad quedara señalado por los altares, al igual que el valor y jerarquía de todas las cosas. En la música tenemos la clave, el diapasón, un acorde. El altar, con su magnificencia, santifica y confiere ese tono que da marco al brillo de la tarea en marcha.
Le Corbusier conduce el movimiento espacial del interior de la iglesia en dirección al santuario. Esta dirección viene marcada por el altar, se refuerza por la ventana vertical en ángulo del muro este y por la pared inclinada que separa la iglesia y el santuario. El empuje más vigoroso viene de los tres focos luminosos que reparten la luz sobre el santuario y el altar. El flujo espacial baja camino del santuario, una vez abajo gira hacia la iglesia, donde se encuentran los altares.
MANEJO DE LA LUZ
La luz cenital esta también asociada como en Ronchamp, al uso espectacular de color sobre los muros, techos y tragaluces de los altares laterales en escalones situados al norte de la nave; las permutaciones de color consisten, en este caso en un techo azul, muros amarillos y un nicho rojo para los tragaluces circulares, alternando aquí y allá con el negro y el blanco. Es importante señalar que el color estaba pensado para dar lugar a efectos espaciales y no decorativos.
CAMPANARIO
El campanario o remate son la expresión inmediata de la esquina del edificio. El volumen superior, que contiene la campana, señala la vía de acceso y proclama la hegemonía del eje norte/sur.
Los apoyos del campanario enfatizan su perpendicularidad, sin embargo su retranqueo y alineación dan preferencia a la fachada este.
APROXIMACION E IMPACTO VISUAL
1- Nos encontramos con el fuerte impacto del muro norte de la iglesia.
2- Tras la sensación de confinamiento producida por el bosque, se experimenta el impacto de una amplia vista. El santuario se ofrece como centro de interés en primer término.
3- En el punto de tensión entre la iglesia y el resto del conjunto, Le Corbusier establece una yuxtaposición considerablemente intensa de líneas horizontales, verticales e inclinadas a las que ritmos y pautas refuerzan.
4- Desde la plataforma de observación revela variedad de formas que se despliegan en figuras desconocidas e insólitas. La satisfacción funcional de las necesidades especificas de la comunidad religiosa depara un impacto visual heteróclito.
REFLEXIONES FINALES
La Tourette encarna una variación sobre el viejo tema de la caja sobre pilares. Pero los cinco puntos de una arquitectura nueva se han enriquecido y ampliado para admitir nuevos elementos.
La secuencia a través de La Tourette pasa por espacios de diverso carácter psicológico, desde el misterio cerrado del pequeño oratorio piramidal hasta la luminosidad abierta del atrio, pasando por la regularidad de la sala capitular y el refectorio.
En coherencia con el planteamiento global a modo de collage, el tamaño, el peso y la textura de la estructura varían de un lugar a otro.
De este modo, La Tourette crea un laberinto medieval de hormigón: una ciudad del espíritu cerrada y animada por impresionantes vistas de la naturaleza. El esquema venia determinado por la regla de la orden dominica, un programa de actividades rutinarias con una antigua sanción histórica:
He tratado de crear un lugar de meditación, estudio y oración para la orden de los predicadores. Los requerimientos humanos de ese problema han guiado nuestro trabajo… Imagine las formas, los contactos, los circuitos que eran necesarios para que la oración, la liturgia, la meditación y el estudio resultasen fáciles en esta casa. Mi trabajo consiste en albergar hombres. En este caso la cuestión era albergar frailes y tratar de ofrecerles silencio y paz, que son tan esenciales para nuestra vida actual. Los frailes… complacen a Dios con este silencio. Este monasterio de rudo hormigón es obra de amor. No alardea; vive desde el interior. En el interior tiene lugar lo esencial.
Existe una constante interacción entre el programa y el emplazamiento, con la colaboración de la pendiente para lograr un resultado eficaz.
El sistema de articulación alcanza un estado de equilibrio dinámico por yuxtaposición de formas opuestas. Aunque la iglesia es intrínsecamente estable, lo más estable del conjunto, la relación espacial con el santuario contiguo induce un cierto grado de dinamismo.
El claustro posee su propia dinámica; la circulación, en un punto, asciende conforme la pendiente baja, y, en otro punto, desciende al cortar las curvas de nivel. La evidente sensación de fuerza muscular del claustro se repite en la totalidad del conjunto. Al oeste, donde la serena horizontalidad de la cubierta se contrapone a la componente vertical en este punto de la ladera, ahí se logra la máxima tensión.
La luz trasciende a la forma como vehículo fundamental de la expresión emocional.
BIBLIOGRAFIA
Analisis de la forma – Geoffrey H. Baker – 1985
Pag. 266 – 297
Le Corbusier – Keneth Framton
Pag. 138 – 142
Le Corbusier: ideas y formas – W. J. R. Courtis
Imágenes
www.google.com
http://www.fondationlecorbusier.fr/
Sobre este Trabajo
Este trabajo, propone como punto de partida la fácil y rápida comprensión de la obra.
Es una recopilación de los tres libros expuestos anteriormente, e intenta reordenar la información para obtener así un análisis mas abarcativo, que no entra en extremo detalle pero si aborda varios aspectos relevantes de La Tourette.
Publicado por Angel Armagno | 13 de noviembre de 2015 - 17:55 | Actualizado: 13 de noviembre de 2015 - 19:08 | PDF